* Exigimos la libertad inmediata del colega Ronald Ormeño, ANP
En Perú un periodista está preso. ¿Su delito? Ser director
de un medio en el que se reveló una investigación sobre los problemas legales
que afronta una universidad en la provincia de Huaura. Ronald Ormeño, junto al
responsable de la investigación, José Pacora Vera, fueron querellados por la
abogada coordinadora de dicha universidad. El juez los sentenció a un año de
prisión suspendida y al pago de una reparación civil solidaria de 10 mil soles.
Los periodistas no pudieron pagar la reparación y la
querellante exigió que se revoque la prisión condicional. Ronald Ormeño Gonzáles fue
capturado el 4 de setiembre y traslado al penal de Carquín en Huaura. Una
severidad extrema de la justicia que genera un clima de miedo. Temor, en un
país en el que las querellas se utilizan como instrumentos para coaccionar a la
prensa crítica y no como mecanismos para resarcir el honor.
Te alarmas cuando visitas la provincia y lo primero que te cuentan los periodistas es que una funcionaria pública de un municipio distrital ante el cuestionamiento y la pregunta incómoda se dirige a los periodistas diciendo: «dejen de difamar o los vamos a querellar para que vayan a hacer compañía a su amigo Ormeño».
Y no estoy santificando todo el periodismo que se hace en el
país. Al contrario. Creo que la autocrítica debe ser una constante. Lo que
preocupa es la facilidad con la que se coarta la libertad de un colega. Y no
porque seamos una clase privilegiada. Sino porque por la naturaleza de nuestra
labor vamos a tener en la otra vereda a mucha, muchísima gente diciendo que lo
que publicamos no es verdad, que estamos afectando su honor. Que hemos
difamado.
Cierro estas líneas y recibo información desde Trujillo. Me
acaban de informar que Renato Sandoval, director de Correo de Trujillo, luego
de ser conducido por la Policía Judicial fue declarado apersonado en el proceso
tras lo que quedó en libertad. Seguimos haciendo fuerza por la libertad de
Ronald Ormeño en Huaura. Exigimos la libertad inmediata del colega Ronald
Ormeño, ANP
Estas líneas son un llamado abierto a todos mis compañeros,
compañeras, colegas. No un llamado sólo a defender a los dos periodistas
apresados. Sino un llamado a defendernos todos y todas. Porque lo que están
haciendo con Ormeño y Sandoval nos está explotando en la cara a quienes hacemos
periodismo. Porque no se puede hacer periodismo en una atmósfera de pavor,
pánico, sobresalto, turbación. Porque no podemos quedarnos quietos y quietas
sabiendo que hay leyes, mecanismos que están y seguirán inhibiendo la
investigación. Porque tenemos el deber de movilizarnos ante los excesos. Para
eso somos periodistas.( Zuliana Lainez)
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